jueves, 26 de marzo de 2015

HACE YA MUCHOS DIAS
         (Fábula galante)

Hace ya muchos días que no huelo el mar,
ni oigo romper la ola furiosa o dulcemente,
ni he tenido noticias
de las cosas que ocurren
en la casa de mis amigos.

Pienso en Juan "el Capita"
y en sus dos hijos pescadores
de nacimiento o en Irene
"la gorda" su mujer,
que freía pescado como nadie
desde el amanecer hasta la noche
para la clientela,
en Playa de Las Nieves donde
hace unos días o unos años
hice vida con ellos.

                                Aprendí
mar y algo mas hondo aún
que entonces no entendí, pero que
luego he visto claramente:
ese subir la barca todos juntos,
beber el ron, dormir a puerta abierta,
sentir que el aire fresco da en la cara
casi cuando amanece y ellos marchan
a su taller en busca de los peces,
o a colocar la nasa convencidos,
como si fueran libres.

Cuánta fe sobre el mar, cuánto amorío,
cuánta resignación, cuánta injusticia.

El turista nacional o extranjero
los ha mirado como
algo muy típico y extraño,
mientras las niñas y mujeres
de todo el vecindario
acarrean el agua hasta la casa
y preparan las luces de carburo
para cuando la noche llegue.
Agua y luz, pensarán,
lujos que el vecindario se permite.

Hace ya muchos días que no huelo el mar,
pero hoy casi lo siento latir dentro
como si fuera un corazón,
enorme y único,
que es a la vez mío y de ellos.

                                   Renacimiento



     



martes, 10 de marzo de 2015

REBELION DE LAS AVES

Desde las altas horas de la noche,
hasta avanzada ya la madrugada
han estado reunidos sin permiso
-la reunión debió ser clandestina-
alrededor de setecientos pájaros, 
según cálculo aproximado.

En dicha reunión se tomaron acuerdos
casi por absoluta mayoría,
se aprobaron una normas de acción,
a las que se ha sumado
todos los animales voladores.

1º) Reprobamos la conducta del hombre
frente a sus semejantes,
su odio y su maldad casi genéricos.

2º)Esta conducta para con las aves
está cercana ya al asesinato.

3º) Su forma de vivir daña los ríos,
los bosques, envenena el aire
y hace inferior la vida a cada instante.

Como protesta por todo lo anterior, 
en esta reunión se ha decidido:

 a) Guardar silencio el día de mañana 
sin un trino que pueda ser oído
por humanos.

b)Manifestarse por el aire, mudos,
con una rama de olivo
prendida de los picos.

De todo lo acordado,
se toma buena nota, para comunicarlo
a todos los países de la tierra.

También es conveniente enviar copia
a la blanca paloma de la paz,
en caso de que  -de alguna forma-
pudiera ser localizada.

Desde el centro de España, en el
año de mil novecientos ochenta y tantos..

La reunión se disolvió en silencio
y parece que no hubo altercados
mayores, dignos de reseñar;
solamente algunos pajaritos
en grupos reducidos, volaron
apresuradamente por el aire
hasta el amanecer.

No hubo detenciones.

                                     Publicado en prensa en 1984




jueves, 26 de febrero de 2015

EL DUEÑO DE LAS HORAS

Esta es la historia 
del hombre que se llamaba
el dueño de las horas.

El dueño de las horas era un hombre 
en apariencia igual que los demás,
debió nacer como si nada un día
y todo transcurría dentro de lo normal,
hasta que en un momento dado,
(seguramente viendo amanecer,
quizá mirando al mar)
el se creyó elegido por los dioses
y decidió, sin más, administrar
el tiempo de los suyos.

Hubo días, entoces, de tristeza
de batalla y de muerte,
el aire de la patria olió muy largamente
a pólvora y podrido y en todo el territorio
conquistado, sólo se oyó la voz del asesino,
que era la voz del dueño de las horas.
La ley era su voluntad, y el tiempo suyo.
Muchos decidieron luchar por defender
aquello que les pertenecía
y perdieron
                   su tiempo,
otros eran los elegidos por el alto
y poderoso señor para ordenar las horas
según su voluntad, y por todo lo cual
se les premiaba con bienes materiales;
el resto de los hombres no sabía
de tiempos ni de horas,
y creían que era bueno 
que los dioses hubieran elegido
al señor de las horas:
y vivieron mucho tiempo sin nada.

Era un día de otoño y el dueño de las horas
se quedó sin las suyas.
Nadie notó en el aire, ni en el agua,
nadie notó en las aves o en los árboles
que poblaban el bosque, señales diferentes,
y, sin embargo, las horas de los hombres
podían empezar a ser ya suyas.

                                                                           Renacimiento

lunes, 23 de febrero de 2015

NIÑOS DEL MAR

No salgamos de nuestro barrio hoy.
Quedémonos aquí, cerca de casa
y vaguemos por estas viejas calles.
Niños del mar, nacimos
junto a la playa de Alcaravaneras
y el corazón estaba azul de infancia
y era copia del mar, lienzo y figura,
estábamos tan cerca...
Pero luego crecimos
y el corazón se nos puso muy rojo, fuimos por otras calles y otros barrios,
la casa quedó lejos,
y nos sentimos como quien se pierde,
como quien ya no atina en su camino.
Ya sois casi unos hombres nos dijeron
porque aprendimos a ponernos tristes.
Después de un gran paseo
de nuevo hemos llegado;
y nuestros pies han ido
sobre las viejas huellas.
Calle Hermanos Garcia de la Torre,
en el número cuatro
-quien lo toque está libre-
y eramos libres, si, en todos
los números del mundo.
El último que llegue no es un hombre
y era perderse, loco, en la carrera;
y todos aprendimos 
a no llegar el último,
porque eso de ser hombre, era muy serio.
Mas hoy, henos de nuevo aquí,
por estas viejas calles
y nuestros pies no encajan
en las huellas que en otro día dejamos.
Y sin embargo pienso
que no debemos alejarnos mucho;
quiero decir,
que nos quedemos ya por este barrio,
por este mar de casa,
a ver si el corazón se vuelve azul
y somos otra vez aquellos niños.

                                                          Oficio Elemental

domingo, 25 de enero de 2015

VERTIGO DE LA NOCHE

Porque muy trabajosamente
fuimos haciendo nuestro aquel vivir,
bajo la recta letra de los libros,
los ojos de Beethoven,
las pordioseras horas del dinero,
el diario vino,
alcohol que nos llevaba
entre la turbia niebla ciudadana
hacia los bordes- vértigo del día.

Porque desesperadamente trataba
de salir del círculo
que, en otras horas, nuestras mismas manos
cansadas construyeron.

Babas de un asco surgido de verticales
sombras de la noche son el don,
el duro filo que separa conciencia
de ebriedad.
Al alba,
sobre los hombros curvos,
la indolencia del día,
como una lluvia fina,
atravesaba al hombre. 

                                         Vértigos 6 y medio

sábado, 24 de enero de 2015




A la mar te fui a buscar
y eso que dificil era,
tu castellana en Castilla
y la mar tan marinera.

                                    Inedito

jueves, 22 de enero de 2015

REGRESO DEL HEROE

Ese ruido que escuchas de regreso, 
como cascos golpeando
sobre los adoquines,
son los héroes que vuelven triunfadores
después de haber ganado la batalla.

Ese clamor que hace vibrar
rítmicamente el aire,
son las voces del pueblo
que ha salido a la calle
a dar la bienvenida
a sus heroes.

Es inútil que cierres las ventanas,
que te arranques los ojos,
o que intentes no oir la algarabía.
Ellos están ahí, acaba de pasar 
junto a tu puerta.

Comprendo tu violencia y tu ira,
mas debes aceptar que hoy ni la muerte
les podría vencer,
porque ya no son ellos
sino las ideas
que ellos representan.

                                                    Renacimiento

miércoles, 21 de enero de 2015

FOTOGRAFIA

Era su hondo caminar, su huella,
su sensitiva predisposición al canto,
sus cuatro patas virginales, eran 
su forma de besar y su alegría
cerca del vino y su tristeza luego
sobre sus ojos bajo su garganta
en la distancia desde el día a la noche,
y de la noche al día.
Eran su odio, su amor, sus calcetines,
su gran manía de mirar al viento
con los ojos abiertos,
su forma roja en corazón, su pecho,
su soledad, su miedo, su ternura
para las flores,para las palomas
su modo de subir las escaleras,
de recordar el mar y las gaviotas,
de mirarse y no verse en el espejo.

Eran y son las cosas que él se sabe;
por eso las repite cada día.

                                                 Vertigos 6 y medio

martes, 20 de enero de 2015

SUPE EL SILENCIO

Vi con los ojos el silencio, puse
sobre él la mano, lo toqué y fue mío,
lo rodeé como si fuera muerte
y más silencio se multiplicaba:
subió a lo alto como si con alas
el aire todo de silencio fuera.

                              Vertigos 6 y medio

domingo, 18 de enero de 2015

CUANDO LOS NIÑOS JUEGAN A LA GUERRA

Cuandolos niños juegan a la guerra,

¡qué tristeza!

Cuando apuntan su arma a nuestro pecho

e insisten que caigamos por el suelo
para hacer más real el triste juego.

Cuando los niños crecen, se hacen hombres, 

y no olvidan el juego de la guerra.
Cuando los hombres mueren, 
cuando los hombres matan
¡qué tristeza!

Niños, no jugueis a la guerra,

porque los hombres
lo aprenden todo de los niños.

Cuando los hombres juega a la guerra,

¡qué tristeza niños!

                                                   Oficio elemental

viernes, 16 de enero de 2015

NO ENTIENDO ESTAS SEÑALES

Un tiempo apenas puro me rodea.
Tempranamente encuentra mi alegría
y se la lleva.
Se queda vivamente el hueco al aire
me deja transparente por donde está la pena.
El aire se detiene y no comprende
por qué me encuentro ahora a ras de tierra.
Me estoy desalegrando de repente.
No entiendo estas señales, 
no las quiero.

                               Cuaderno de urgencia
DE TODO CUANTO SUPE

De todo cuanto supe,

sólo me queda la verdad del hombre
que fue a buscar la vida
un día, y que no ha vuelto solitario.

                                Hombre aprendiendo

                               Cuaderno de urgencia                               
                               Renacimiento

miércoles, 14 de enero de 2015

APRENDIENDO A MORIR                                  

Aprendiendo a morir todos los días 

y nunca me acostumbro. 
Siempre mirando fijo al polvo
a ver si se levanta una esperanza.
Sólo queda camino en estos ojos.
se me van los diciembres de la mano.
La tristeza me sube por toda la estatura.

Algunas tardes claras, 
se quedan detrás de mis pupilas
irremediablemente. 
Comprendo, entonces,
que hay que buscarse una esperanza
para seguir viviendo.

                                    Hombre aprendiendo

martes, 6 de enero de 2015

TENTACIÓN

Todo me dice sí,

Me esta llamando,
Pero debo ser cauto
Porque soy el guardián.
                 
                 Que no sea el olvido

lunes, 5 de enero de 2015

EL RITO

Allá en la planta ocho,
En la esquinita, junto a la ventana,
Tenía lugar el rito.

Tú eras, no faltaría más,
La única, la auténtica,

La gran reina del humo.

                            Que no sea el olvido

ESTATUA DE SAL

Si vuelvo la cabeza

veo la arena, el mar y un niño lejos.

                                       Renacimiento 
                                       Oficio elemental



EL RÍO QUE TÚ ERES

Junto a la casa a veces pasa un río.

No siempre ocurre igual. Viene de lejos
Y no sé a dónde va, sólo lo siento
Fluir lento, seguro, rumoroso.

No es de agua este río, como otros,

Ni tampoco de luz. Acaso sea
Aquello que algún día fue la vida
Y ahora viene y va como un recuerdo.

Y me lame los pies, cuando descalzo

Me acerco hasta su orilla, luego sube
Despacio todo el cuerpo, lo recorre

Dejando allí su huella remansada.

Ocurre, como digo, solo a veces.
Diciembre es más propicio a la crecida.

                                       Que no sea el olvido
OTRO DÍA

Ahora está amaneciendo y si te digo
otro día, 
Es otro día
No te quiero engañar:
Es toda la verdad, o lo que queda

                         Que no sea el olvido
EL BUEN COBIJO
(TARDE AMARILLA)

Entre estos muros graves en que crece

la ciudad donde habito, el viento viene
levantando el otoño con sus ramas
terribles por mis ojos asombrados.
Es pan de nadie este amarillo vuelo
malo para mirar; solo la casa
ofrece buen cobijo en esta hora
primera de la tarde, donde el ocio
y el tedio nos hacen compañía.
Y así vamos hablando
sin decirnos palabra
de un tiempo que vendrá,
o que ha pasado. El viento
se detiene muy cerca de tus ojos.
Algo sencillamente humano
ha rozado un instante
tus labios o mis labios.

                                        Renacimiento                                                                                     Oficio elemental



COSA DE NIÑOS

A veces, los niños,
se quedan,
con la mirada fija,
quiero decir, pensando.
Entonces,
quisiera ir hasta ellos, de puntillas,
silencioso, sin que me lo notaran, y atravesarlos lento, quedamente.
Y, dentro ya,
asomarme a sus ojos,
ver por ellos;
ponerme seriamente a su nivel.
Y de repente, ay!,
como si despertase,
hacer igual que ellos,
volver de nuevo al juego,
saltar, ponerme alegre
y reír, limpiamente, 
y verme reflejado 
al aire, puro; 
ir hasta mi, despacio, 
palparme, aceptarme,
entrar en mí.
Y allí reconocerme.

                                      Oficio elemental
LA PUERTA

Paso el puente,

voy hasta las murallas,
entro en esta ciudad
y la recorro;
beso las losas frías de su suelo;
escarbo entre la tierra,
planto un árbol
que crece por su pecho
y da sus frutos
que se caen por el aire:
ruedan hasta mi boca.
Muerdo. Y son unos labios
humanos los que muerdo.
Pero se acaba el día 
y tú ciudad, no sabes
todo el amor que traigo.

                                Oficio elemental


AMANECE


Amanece diciembre, y ya tu blanca 

Mano me está diciendo adiós
Y no lo acepto.

                                            Que no sea el olvido